PAMPLONA, 8 (EUROPA PRESS)
La Dirección General de Vivienda del Gobierno de Navarra priorizará actuaciones de rehabilitación energética de edificios residenciales -fundamentalmente a través de la mejora de sus envolventes térmicas- y las intervenciones en edificios ubicados en barrios que sean considerados vulnerables dentro de la estrategia de rehabilitación protegida y regeneración urbana marcada en el Plan Biziberri/Navarra Rehabilita y en las nuevas convocatorias de ayudas con cargo a los fondos extraordinarios procedentes del programa europeo Next Generation.
Así lo han subrayado el vicepresidente y titular de Vivienda del Ejecutivo foral, José Mª Aierdi, la directora general de Vivienda, Ana Bretaña, y la técnica de la Oficina de Rehabilitación de Viviendas y Edificios (ORVE) de Estella-Lizarra, Ana Rodríguez, durante la presentación pública que han realizado hoy de la III edición de los Premios Biziberri, para los que concurren como finalistas siete proyectos promovidos por particulares o comunidades vecinales.
Estos proyectos han sido previamente seleccionados por los equipos técnicos de las nueve ORVE por distintos factores que les convierten en ejemplos inspiradores para estimular los proyectos de rehabilitación en el parque residencial.
La iniciativa de los premios Biziberri pretende visibilizar y distinguir las actuaciones de rehabilitación protegida más destacables en estos dos últimos años y que, con carácter bienal, celebra ahora su tercera edición, después de los premios entregados anteriormente, en 2018 y 2020.
Esta distinción tiene especialmente en cuenta actuaciones de rehabilitación que se signifiquen por su esfuerzo en la recuperación y mantenimiento del parque residencial ya existentes, por la calidad o innovación en la ejecución de los proyectos, por la reinterpretación que se hace de los edificios para adaptarlos a distintas necesidades o por la implementación de una arquitectura responsable y comprometida con el medio ambiente, con la transición energética y con el entorno urbano y social.
«Los premios Biziberri se enmarcan en la estrategia impulsada por el Gobierno de Navarra desde hace ya seis años para reactivar las políticas de rehabilitación de nuestro parque residencial y de regeneración de entornos urbanos con la finalidad de recuperar, revitalizar y dotar de alma a nuestras ciudades, pueblos y barrios, con un triple objetivo social, medioambiental y de reactivación económica», ha destacado Aierdi.
Durante su intervención en la presentación de esta campaña, el vicepresidente ha subrayado que este tipo de actuaciones de rehabilitación energética y regeneración urbana «se han convertido, hoy por hoy, en la mejor herramienta para responder con audacia a los retos de emergencia climática, reducción de consumo energético y fortalecimiento de la cohesión social de nuestras ciudades, pueblos y barrios».
El responsable de Vivienda se ha referido, en este sentido, a los objetivos marcados en el Green Deal o Pacto Verde Europeo, en la Renovation Wabe u ola de rehabilitación y en la Estrategia Navarra de Transición Ecológica/Navarra Green, que se centran en la rehabilitación energética de edificios para alcanzar el objetivo de la total descarbonización de las ciudades en el año 2050.
Los siete proyectos finalistas, así como el testimonio de las personas protagonistas que los han promovido, concurrirán en una gala que se celebrará la tarde del próximo 22 de noviembre en la Filmoteca de Navarra, en la que se dará a conocer y se hará entrega del III Premio Biziberri.
Entre los proyectos finalistas, se encuentra una intervención de accesibilidad en Berriozar en un edificio de ocho familias, por medio de la implantación de un innovador ascensor, en un proyecto promovido por una cooperativa vecinal.
Otro proyecto finalista está en Tudela, en el barrio de Lourdes. Se trata de la mejora de la envolvente térmica promovida por las comunidades vecinales de un bloque de los años setenta de ocho portales y 56 viviendas, conocido popularmente como el Scalextric.
En Aibar, opta a los premios un proyecto de recuperación integral, con mejora de la eficiencia energética y las condiciones de salubridad, de una casa unifamiliar en planta baja de tipología rural cuyo promotor Serio Elarre es un joven que ha apostado residir en esta localidad.
En Sangüesa se encuentra otro proyecto finalista. Es la recuperación y rehabilitación de un edificio residencial del año 1800 ubicado en el casco antiguo, con aportación al mantenimiento del patrimonio histórico artístico de la ciudad, una intervención promovida por Tetyana Pavlenko.
Otro de los finalistas está en el barrio pamplonés de Azpilagaña. Se trata de la actuación de mejora de la envolvente térmica de dos portales de edificios de planta baja, cuatro alturas y ático ubicados en un barrio consolidado de Pamplona, promovida por ambas comunidades vecinales.
También en Pamplona, en la calle Mañueta, opta al premio la rehabilitación integral de un edificio de más de 200 años que fue la casa natal del maestro de guitarra Agustín Castellón ‘Sabicas’, impulsor de la internacionalización del flamenco.
Finalmente, en el Segundo Ensanche pamplones, el último finalista es una actuación de supresión de barreras arquitectónicas y creación de un nuevo núcleo de comunicaciones dentro del patio de un edificio ubicado en la calle Pascual Madoz de la capital navarra.
Estas siete intervenciones han sido recogidas, a su vez, en varias piezas audiovisuales de distintos formatos creadas por el cineasta tudelano Julio Mazarico, que formarán parte de una campaña impulsada por el Gobierno de Navarra para promover y estimular proyectos de rehabilitación bajo el lema ‘Rehabilitar con conciencia / Sakonki birgaitu’. La producción audiovisual cuenta con música original del compositor Vidal Díaz y la participación voluntaria de las bailarinas Claudia Vicente, Ana José, Laura Grávalos, Lara Acarreta y Ana Saso, y el bailarín José Mª Royo.
En lo que respecta a las acciones activadas por el Gobierno de Navarra en estos últimos años, Aierdi se ha referido al incremento de las subvenciones que el Ejecutivo dedica a la rehabilitación protegida, que se han triplicado desde 2015 al pasar de 9 millones de euros a más de 28 millones, así como al salto cualitativo que espera dar con las diferentes nuevas líneas de ayudas activadas poco antes del pasado verano, en el marco del Plan Biziberri, aprovechando la inyección de los fondos extraordinarios de los Next Generation.
Asimismo, en una segunda línea de actuación, el consejero de Vivienda se ha referido también al despliegue de equipos técnicos de asesoramiento y apoyo que el Gobierno foral ha puesto al servicio de las personas y comunidades vecinales promotoras para acompañarles en todo el complejo proceso que implica un proyecto de rehabilitación. Este servicio se ofrece a través de las nueve ORVE distribuidas por todas las comarcas de la Comunidad Foral y recientemente se ha visto reforzado por los equipos técnicos del programa europeo ELENA, cuya función pasa por dinamizar y prestar asistencia técnica a las comunidades vecinales y que han empezado ya a trabajar en estrecha colaboración con las ORVE en todas las comarcas de Navarra.
Finalmente, en la presentación de este martes ha participado también, como representante de las nueve ORVE distribuidas entre Aoiz, Burlada, Santesteban, Estella-Lizarra, Lakuntza, Pamplona, Sangüesa, Tafalla y Tudela, la técnica Ana Rodríguez, quien ha explicado el papel que juegan estas oficinas ofreciendo un servicio de proximidad y atención directa a la ciudadanía de asesoramiento, información, ayudas en los trámites del expediente y obtención de subvenciones, redacción de proyecto o asistencia técnica en la gestión del proyecto, adjudicación de las obras, ejecución y seguimiento de las mismas, entre otros pasos que implica un proyecto de estas características.