Las tormentas obligaron a suspender varios actos en la jornada del sábado
29 de julio de 2019
Este domingo han finalizado unas fiestas de Elizondo marcadas por la presencia de la lluvia y por el buen ambiente vivido en las calles de la localidad.
El miércoles, víspera de Santiago, arrancaban las fiestas de Elizondo en una jornada marcada por la actuación de los gigantes y, como no podía ser de otra manera, por los dos txupinazos: uno por la mañana y otro por la tarde.
El jueves 25, día de Santiago, fue el día grande de las fiestas. Hubo las tradicionales sokadantza, mutildantzak y el baile de los gigantes acompañado de la banda de Elizondo.
El viernes se celebró la comida de cuadrillas y destacó la gran calidad musical de los conciertos de Odolaren Mintzoa, Tremenda Jauria y Tirry&Tery. Fue un día en el que los niños y los jóvenes fueron los protagonistas.
La del sábado fue una jornada totalmente condicionada por la lluvia. Varios actos se suspendieron y otros se modificaron por las precipitaciones. Aun así, se pudo disfrutar de un gran ambiente en las calles, donde hubo una mayor presencia de jóvenes procedentes de diferentes puntos de la geografía navarra. La orquesta Oharkabe se encargó de poner la música en la plaza.
Por último, este domingo tocaba despedir las fiestas con el tradicional zikiro jate, que contó con más de 750 comensales. También se celebró el XXII Campeonato Mundial de Canicas, en el que Víctor del Campo se proclamó vencedor por quinta vez. Para terminar, con el Pobre de Mí se despidieron las fiestas hasta el año que viene.