Agentes de Policía Foral adscritos a la comisaría de Elizondo se encontraban recientemente llevando a cabo un control de seguridad ciudadana en la N-121A.
Tras dar el alto a un turismo, los agentes observaron que un vecino de Irún conducía mientras veía una película y hacía uso de unos auriculares.
El hombre de 41 años, portaba su teléfono móvil en el lado del copiloto. Los agentes sometieron al conductor al test de alcohol, en el que superó la tasa de 0,60 mg/l.Por este motivo, fue investigado por un delito contra la Seguridad Vial al superar la tasa de alcohol legalmente establecida.