El grupo municipal de UPN en Pamplona ha presentado “seis acciones basadas en la tecnología para convertir esta ciudad en una ‘smart city’. Con el fin de situar la capital navarra como una ciudad más sostenible, inclusiva y funcional, los regionalistas han defendido que “mediante la integración de herramientas como el Internet de las Cosas (IoT), la inteligencia artificial y el análisis de datos en tiempo real, tendremos el potencial de abordar problemas cotidianos de manera eficaz, desde el tráfico y la contaminación hasta la gestión de residuos y la seguridad”.
Pamplona ya ha dado algunos pasos en este sentido gracias a la creación de la estrategia Smart City Pamplona y al Programa Smart Iruña Lab, que ha celebrado su tercera edición para encontrar proyectos piloto que integren la tecnología para mejorar la ciudad. “Han surgido proyectos muy interesantes, pero es el momento de ejecutarlos, tal y como están haciendo otras ciudades como Santander, que es un buen espejo en el que mirarse”, han sugerido los regionalistas.
Las seis acciones planteadas por UPN han sido rechazadas en el Pleno del Ayuntamiento por EH Bildu, PSN y Geroa Bai. “Hablan de que hay que diseñar una hoja de ruta y una planificación, pero llevan un año y no han avanzado en nada. Por supuesto que hay que planificar, pero los ciudadanos exigen sobre todo que se ejecuten acciones y que se vean mejoras en la ciudad. Estas propuestas se pueden traccionar ya para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”, han concluido.
Propuestas presentadas por UPN:
1. Sensores para el conocimiento de plazas libres en la zona azul
Instalación de sensores en plazas de aparcamiento que indiquen a los conductores, mediante una aplicación móvil, o paneles en determinados puntos (similares a los informativos sobre plazas en parkings subterráneos) dónde hay sitios de la zona azul disponibles en tiempo real.
2. Iluminación Inteligente
La iluminación urbana representa una parte significativa del consumo energético de una ciudad. Gracias a la tecnología, es posible instalar farolas inteligentes que ajusten su intensidad según las condiciones de luz natural o la presencia de personas. Conseguir adaptar esta iluminación ayuda a reducir costes energéticos, de mantenimiento e incluso de seguridad, porque existe la posibilidad de colocar cámaras en ellas que alerten de cualquier incidencia.
3. Gestión eficiente de residuos
El manejo de residuos es un desafío constante para las ciudades. Con el uso de contenedores inteligentes, equipados con sensores que detectan el nivel de llenado, es posible optimizar las rutas de recolección. Esto no solo reduce los costos operativos, sino también la huella de carbono de los camiones recolectores.
4. Sensores para medición y control de la calidad del aire y para la mejora del riego.
En Pamplona ya se han instalado sensores que monitorean la calidad del aire en tiempo real. Debemos dar un paso más y, gracias a ellos, modificar en tiempo real el tráfico por la ciudad.
Paralelamente, instalación de sensores que controlan la humedad en las zonas verdes, ajustando el riego y optimizando el agua.
5. Reducción de la contaminación acústica
Las ciudades inteligentes utilizan sensores acústicos para mapear los niveles de ruido en diferentes zonas y tomar decisiones informadas, como la implementación de barreras acústicas o la regulación del tráfico en áreas críticas. Puede ser muy útil en el Casco Viejo especialmente.
6. Cargadores solares para móviles en las calles
Instalación de puntos de carga, alimentados por energía solar, para proporcionar a los ciudadanos una forma gratuita y ecológica de recargar sus dispositivos mientras disfrutan de los parques, plazas o estaciones de transporte.