González Laya anuncia que AECID destinará este año 5 millones para los refugiados saharauis
MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha insistido en que la solución al conflicto del Sáhara Occidental pasa por una salida negociada por las partes en la que la ONU debe desempeñar un papel central, al tiempo que ha confiado que esa postura defendida por el Gobierno sea también una «política de Estado».
Así se ha pronunciado la jefa de la diplomacia ante una interpelación presentada en el Senado por el senador del PNV Luis Jesús Uribe-Extebarría Apalategui, quien ha expresado la «preocupación» de su grupo por la operación militar lanzada por Marruecos el pasado 13 de noviembre en Guerguerat y que considera fue una violación del acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Rabat y el Frente Polisario en 1991.
La ministra ha reconocido que es un asunto que el Gobierno ha seguido también con interés desde el primer momento, manteniendo contactos en particular con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, con vistas a evitar una escalada en la región y apelando a las partes a la responsabilidad y la contención.
González Laya ha insistido nuevamente en que para el Gobierno la ONU tiene un «papel central» en la resolución de este conflicto y ha recordado al senador del PNV que corresponde a la Misión de la ONU (MINURSO), no solo organizar el referéndum de autodeterminación que aún no se ha celebrado sino velar por el cumplimiento del alto el fuego y denunciar su incumplimiento llegado el caso. «No les corresponde ni a las partes ni ha terceros», ha subrayado.
POSICIÓN FIRME DEL GOBIERNO
El Gobierno mantiene una «posición firme, constante, y de Estado, que no es otra que la del apoyo a la búsqueda de una solución que ha de ser política, justa, duradera y mutuamente aceptada como establecen las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU», ha recalcado la ministra de Exteriores.
«El recurso a la vía armada», ha advertido, no solo es contrario a la Carta de Naciones Unidas sino que podría generar aún más sufrimiento a los habitantes de la región.
Por ello, ha insistido en la importancia de que Guterres nombre «a la mayor brevedad» a su nuevo enviado personal para el Sáhara Occidental, toda vez que el puesto está vacante desde la renuncia en mayo de 2019 de Horst Koehler. Su nombramiento, ha subrayado, permitiría «encauzar por la senda del diálogo» la situación actual.
En este sentido, González Laya ha recordado que el Gobierno español mantiene su oferta de poner a disposición del enviado para el Sáhara Occidental un avión de la Fuerza Aérea española para facilitar sus desplazamientos y sus esfuerzos de mediación.
Por otra parte, ha defendido que «es tremendamente importante» que esta postura del Gobierno respecto al Sáhara Occidental «sea política de Estado» y ha dejado claro que «España ni puede ni debe propugnar una solución concreta» sino que deben ser las partes las que, con apoyo de la ONU, encuentren una solución.
AYUDA A LOS REFUGIADOS
Asimismo, la titular de Exteriores ha puesto en valor el apoyo que desde el Gobierno se ofrece a los refugiados saharauis. Según ha precisado, entre 2017 y 2020 la AECID destinó más de 23 millones de euros, 10 millones solo el año pasado.
Además, ha resaltado que frente a la dotación inicial de 3,5 millones de euros de AECID en 2020 –que finalmente ascendió a 5,5 millones mediante convenios y convocatorias a ONG–, para 2021 esta cantidad se ha elevado hasta los 5 millones, un 43 por ciento más que el año pasado.
En este punto, González Laya ha resaltado el «esfuerzo encomiable» que realizan también las comunidades autónomas y las entidades locales en apoyo a los refugiados saharauis, que ha tildado de «imprescindible» y ha agradecido.
También se ha referido a la «corriente de solidaridad de la sociedad española», mencionando en particular el programa de Vacaciones en Paz del que se benefician unos 4.000 niños saharauis y que «se encuentra momentáneamente suspendido por la pandemia pero que esperamos que se reanuden cuando las condiciones lo permitan».
Por su parte, el senador del PNV ha lamentado el «fracaso sin paliativos» de la ONU a la hora de solucionar este conflicto, ha recalcado que Marruecos «carece de soberanía sobre el Sáhara Occidental» y ha defendido que «statu quo actual es inaceptable y dura demasiado tiempo».